lunes

Encerrada entre la complejidad y la cobardía. No podía reaccionar ante la vida como tal. La vida se hacía más corta, el tiempo más lento... Las paredes de mi existencia se hacían cada vez más grandes, o quizás yo me hacía más pequeña... no lo sé.. Ya no sabía nada... 
No sé nada.
No sé hablar.
No sé escribir.
No sé pintar.
No sé cantar.
No sé caminar.
No sé amar.
No sé besar.
No sé tocar.
No sé comer.
No sé respirar.
No sé vivir.

Ya no sé nada. 

No hay comentarios.: