lunes

En un rincón veo al Miedo gritar. Sus ojos tan abiertos y desesperados por calmar sus pensamientos.
Está ahí... solo, desnudo. Lleno de heridas por sus propias garras tratando de desgarrarse la piel. Y me mira con  rencor, me mira y me grita aun más fuerte...  Me trata de culpar de su temor... me trata de culpar de todo.
Su gritos llenan el vacío de una habitación muerta que trata de engañar su idiotez con golpes en la pared. y grita... grita...
Desnudo con la sangre recorriendo su cuerpo trata de lamer sus heridas, pero su sangre es tan amarga como su corazón... escupe y grita... grita y escupe.
-Amor mio, tranquilo...estoy aquí... nunca me fui... no trates de odiarme... no puedes... no puedes odiarme si tu eres parte de mi...y yo parte de ti. Nacimos para estar juntos. Nacimos siendo hijos de Caín... estamos destinado a todo esto que nos pasa... solo tranquilízate que pronto podrás callar esos gritos. No desesperes...cierra tus ojos y vive como tu quieras vivir... con o sin mi....pero no olvides nunca que estoy dentro de ti y en alguna oportunidad tus heridas sanarán....


Y lo último que escuché... fue un grito profundo, aun culpando... aun desesperado... aun con temor.... Un grito de soledad y tristeza. Ante ésto ya no pude hacer nada más.

No hay comentarios.: